Desde hace
unos días se ha publicado en este nuestro periódico las quejas de los vecinos
del Realejo. A grandes rasgos destacaría dos muy esenciales:
-El problema
de aparcamientos en la zona.
-El cierre de
negocios del barrio “alto” en detrimento de la calle Molinos la cual se
masifica.
Todo ello se
puede solucionar a corto, medio o largo plazo. Está en manos de la UGR ya que si se terminaran de una vez las obras de la
Escuela de Arquitectura en el Hospital Militar situado en el Campo del Príncipe
otro gallo cantaría.
En el momento
que se terminen las tan ansiadas obras por parte de los estudiantes, los cuales
ahora mismo nos encontramos masificados en un edificio no diseñado para el uso
que se le está dando, el barrio volverá a renacer.
Cientos de
alumnos buscarán apartamento por la zona, al igual que comercios asociados a
esta cuantía de gente, además de comercios específicos se abrirán.
Y es más, creo
que aún se podría estar a tiempo de introducir un buen parking en este edificio
o en el mismo campo del príncipe, pues si esto no se soluciona, imagínense cuando
al problema de parking para los vecinos se le sume la llegada en coche de
alumnos de otras zonas de Granada…
Pues eso, los
problemas de este barrio se podrían solucionar a corto plazo si la UGR, el
Ayuntamiento y la Junta se lo propusieran en serio de una vez.
Nuria
Díaz Lopez
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